De repente.
De repente le miro y me parece una persona extraña, ajena.
Veo su cara, esa que tantas veces me hizo suspirar, y se me aparece ahora borrosa. Los recuerdos se han esfumado y se limitan a lo que estoy viendo en este momento.
Me habla, y es como si estuviera al fondo de la sala, aunque está delante de mÃ, compartiendo la tarde y un café. No sé cuanto rato llevamos asÃ.
Oigo pero no logro escuchar. Está lejos, muy lejos.
Aunque quien se ha ido, he sido yo.
Com costa d’explicar allò que no decideix el cap, eh?
Marcel - January 31st, 2010 at 2:45 pm